lunes, 5 de noviembre de 2012

Critica de la obra 19 de abril de 1810. e Reinaldo Rojas


INTRODUCCIÓN
     El 19 de Abril de 1810, es una de las primeras obras del autor Reinaldo Rojas, donde el objeto central de la misma es el estudio dl proceso de Independencia venezolano, específicamente los acaecidos el 19 de Abril de 1810 donde afirma el autor la Capitanía General de Venezuela inicia su tránsito a la República, donde el 5 de Julio de 1811 declara su absoluta separación e Independencia del Imperio Español y que sellará por completo el 24 de Junio de 1821 en la Batalla de Carabobo.
     Esta obra fue publicada en 1986, la misma consta de 4 capítulos, donde el autor estudia los sucesos del 19 de Abril pero partiendo desde un contexto internacional, luego el nacional y como todo esto fue influyente y decisivo en este acontecimiento tan importante.
     En esta nueva edición, la quinta, aumentada y corregida se agrega nuevos estudios. Uno orientado al estudio del proceso político y cultural de la sociedad para 1810. Otro, el cual valora el aporte de Francisco de Miranda al movimiento de transformación revolucionaria que vive Venezuela, las Américas y la Europa Occidental, luego de la Revolución Francesa en 1789.
     El libro presenta dos perspectivas de análisis de los acontecimientos suscitados tanto el 19 de abril de 1810 como el 5 de Julio de 1811.
     El 19 de Abril, la perspectiva de análisis ha sido el de la Historia Económica y Social, fundada y desarrollada por la escuela de los Annales. Análisis de una fecha histórica combinando el aparato conceptual marxista con los tiempos de corta, media y larga duración, presentando el 19 de Abril más allá de anécdota, de la simple narración cronológica del acontecimiento y de su apología como fecha patria, para ubicar aquel suceso en la dinámica global de su tiempo, destacando su universalidad pero sin desconocer la singularidad que le corresponde como fenómeno histórico concreto, en tiempo y espacio.
     La otra perspectiva presenta una serie de documentos como; las Actas del 19 de Abril y 5 de Julio, además de la relación elaborada por Vicente Emparan y la versión dada por el intendente Basadre sobre los acontecimientos del 19 de Abril, con estos dos últimos documentos se pretende ir un poco más a fondo sobre los acontecimientos de ese día tan importante para la historia de Venezuela.
     Entre los otros estudios que presenta la obra, como su título lo menciona se encuentra uno llamado Venezuela 1811: Crisis del Antiguo Régimen, Imaginario Político y Nación, el cual es abordado desde una perspectiva de análisis que integra la historia de la cultura y la historia política, bajo el enfoque de las Representaciones Sociales y de los Imaginarios Políticos, partiendo de la conceptualización de la nación como una comunidad imaginaria, construida como fenómeno político en su dimensión simbólica y afectiva. En este estudio se trabaja con la noción de actores sociales, prensa, opinión pública y nuevas sociabilidades, en el contexto del tránsito a la modernidad. Donde el autor afirma es la otra cara del proceso de Independencia, en el cual se aprecia el paso de la monarquía a la Republica, el nacimiento de la nación frente al Imperio.

CRITICA INTERNA

LA OBRA Y COMPARACIONES CON LAS OTRAS EDICIONES
     En la obra sobre El 19 de Abril, el paradigma a seguir en el análisis histórico es, según afirma el autor, el de la perspectiva de análisis de la Historia Económica y Social, fundada y desarrollada por la escuela de los Annales. Donde también se realiza el análisis de una fecha histórica combinando el aparato conceptual marxista con los tiempos de corta, media y larga duración.
     En relación a la obra trabajada, se está usando la 5ta edición aumentada y corregida, la cual además presenta otros estudios sobre la independencia. Cabe resaltar que la presente edición es la más reciente y presenta corrección a las anteriores, al revisar las 0tras 4 publicaciones de esta obra se puede evidenciar los distintos cambios sobre todo en las editoriales y documentos presentados por el autor, donde solo serán constantes en las 5 ediciones el documento sobre la Instalación de la Junta Suprema en el glorioso día 19 de abril de 1810 y el Acta de la Independencia de Venezuela.
     Con respecto a la primera edición, la misma fue publicada en 1986 a través de Fundacultura, el autor presentará en esta edición además de los 4 capítulos que conforman la obra, como anexo 8 documentos relacionados al tema y sumamente importantes por si significación, donde entre ellos tenemos; 1.Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano de 1789, 2. Carlos IV cede formalmente a Napoleón todos sus derechos sobre España e Indias, 3. Presentación de las primeras notabilidades de Caracas, designando comisiones para tratar con el Gobernador y Capitán General de Venezuela, sobre formación y organización de la Junta Suprema, 4. Instalación de la Junta Suprema de Venezuela en el glorioso día 19 de Abril de 1810, 5. La suprema junta conservadora de los derechos de Fernando VII en Venezuela a los cabildos de las capitales de América, 6. Discurso de Simón Bolívar ante la Sociedad Patriótica 1811, 7. Acta de la Independencia de Venezuela, y 8. Declaración de Independencia de las Provincias Unidas de Venezuela por el Cabildo de Barquisimeto. 18 de Abril de 1811.
    La segunda edición en publicada en Barquisimeto en 1993, mediante el Centro de Historia Larense. La tercera edición corregida y aumentada, se publica en 1997 en Duaca a través de la Oficina del Cronista Oficial del Municipio Crespo-Fundación Buría, esta presenta 4 capítulos al igual que las anteriores y entre sus apéndices, 3 documentos; la Instalación de la Junta Suprema de Venezuela en el glorioso día 19 de Abril de 1810 y el Acta de la Independencia de Venezuela, además del discurso que pronuncia el autor en Carora en 1997 con motivo del 187º aniversario del 19 de Abril de 1810. La cuarta edición publicada en 2005 a través de la Zona Educativa del Estado Lara-Fundación Buría en Barquisimeto, la misma presentará como cambios la inclusión de un segundo discurso del autor, presenta los 3 documentos que la edición anterior y se anexa el discurso pronunciado por el autor en Cabudare en 2002, en el 192º aniversario del 19 de Abril de 1810.
     Ya por último en esta quinta edición presentará los mismos 4 capítulos, con la diferencia que se evidencia un cambio en el cuarto capítulo titulado ¿Por Qué el 19 de Abril de 1810? Donde el autor en su último párrafo realiza cambios en la redacción del mismo, cambios presentes solo en esta edición. Esta nueva edición presenta 2 nuevos estudios sobre la independencia, el primero sobre la Crisis del Antiguo Régimen (colonial) y el segundo sobre Francisco de Miranda y la importancia de este en la gesta emancipadora. Los anexos documentales están conformados por las actas de la Instalación de la Junta Suprema de Venezuela en el glorioso día 19 de Abril de 1810 y el Acta de la Independencia de Venezuela y presenta como nuevo 2 documentos, uno sobre la Relación de Emparan al Rey  y otro sobre El 19 de Abril de 1810. Versión del Intendente de Ejército y Real hacienda Don Vicente Basadre. Cabe resaltar que los mismos son fuentes de primera mano sobre este día tan importante para todos los venezolanos, en el cual se observa la versión de estas autoridades españolas sobre este día y los sucesos dados.
ANÁLISIS DE LA OBRA
     La obra se divide principalmente en 4 capítulos, al iniciar el análisis de los mismos, nos encontramos con el primero titulado El contexto Internacional donde el autor afirma que para la segunda mitad del siglo XVIII Europa y América son testigos protagónicos de grandes transformaciones sociales y políticas que desencadenan en la crisis final del antiguo régimen feudal y el surgimiento de una nueva sociedad industrializada, urbanizada y capitalista.
     Se desarrollaran una serie de acontecimientos donde destacan la Revolución Industrial inglesa, la Revolución Burguesa Francesa, crisis del dominio colonial europeo en América, principalmente con la Independencia de EE.UU en 1776 y la Revolución Anti-colonial y Antiesclavista en Haití en 1804.
     De estos acontecimientos, el económico-social más significativo fue la Revolución Industrial Inglesa y el acontecimiento político más importante la Revolución Francesa, acontecimiento antimonárquico, republicano, en el que se expresan y difunden con más fuerza las ideas de la Ilustración, ideas que también eran conocidas en Hispanoamérica por los círculos de intelectuales y tal como lo afirma el autor los mismos servirán de fundamento doctrinario a la emancipación.
     Es importante señalar que estas ideas y todo este movimiento de la Ilustración estaba representado por; D´Alembert, Diderot, Lamartine, Rousseau, Condillac, Bayle, Voltaire, el liberalismo económico, el Kantismo alemán y el empirismo inglés, además de intelectuales españoles como Campomanes, Jovellanos y Cabarrus, todas estas ideas llegaban a América de Europa generalmente por la vía del contrabando.
     Dichas ideas tendrán un gran efecto en la mentalidad de los hispanoamericanos y su deseo de emancipación. Donde son muy significativos; la Independencia de los Estados Unidos en 1776, que es el primer proceso victorioso de lucha anticolonial en el continente, en el cual además de declararse la independencia, se elabora la primera Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano y años más tarde se redacta la Constitución de los Estados Unidos de América, elaborada en la concepción de un Estado Federal, garante de la soberanía popular, división de poderes, electividad de cargos públicos, entre otros principios.
     Estos acontecimientos citados con anterioridad serán de gran influencia en Hispanoamérica y en Europa, especialmente en Francia, donde el autor cita a Deborin, quien dice “los mejores representantes del pueblo francés veían en la Declaración de la Independencia y en el “Bill de los Derechos” la realización de sus sueños”, puesto que los franceses tomaron la idea de los norteamericanos de proclamar sus derechos mediante una declaración. Hecho que se evidencia el 14 de julio de 1789, cuando el pueblo parisino toma la Bastilla y cuando el 4 de agosto de 1789, la asamblea constituyente declara la abolición del régimen feudal y como más tarde el 26 del mismo año la asamblea vota la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.
     Los sucesos acaecidos en Francia generan reacciones en Haití, colonia francesa, a partir de 1790 con los blancos propietarios que habitaban en la isla, desencadenando en la Independencia de la isla el 1º de enero de 1804.
     En relación a España, se tiene que para fines del siglo XVIII, en 1788, muere Carlos III y asume el trono su hijo Carlos IV. El nuevo monarca entra en conflicto con Francia y por ende todas aquellas ideas y movimientos republicanos de influencia francesa serán reprimidas.
     España vivirá en guerra contra los franceses hasta que firma la Paz de Basilea en junio de 1795. Un año más tarde firma una alianza con Francia para luchar contra Inglaterra. En 1804, Napoleón Bonaparte se ciñe la corona de Emperador de Francia, en 1807 decreta el bloqueo continental a Inglaterra al cual España se une como aliada de Francia. Más sin embargo en 1808 tropas francesas ocupan España e imponen a José Bonaparte, hermano de Napoleón, como nuevo monarca. El Rey Carlos IV quien había abdicado a favor de su hijo Fernando, pero que debido a la presión de Napoleón revoca su decisión y entrega la corona y todos los derechos sobre las colonias españolas en América a Bonaparte. Todo este panorama es el que se vivía en el contexto internacional entre final del siglo XVIII y principios del siglo XIX, y que son significativos y determinantes en los acontecimientos que van a ocurrir en el territorio nacional hacia 1810.
     Luego de ese contexto internacional y de cómo era el panorama, el autor presenta cual era la situación de “Venezuela entre 1800 y 1810 (II capítulo de la obra), la cual para la época era una de las colonias más prósperas de Europa.
     En la obra el autor presenta un cuadro sobre la población venezolana y su estratificación étnico-social tomado de Federico Brito Figueroa (Historia Económica y Social de Venezuela, tomo I), en el mismo se evidencia que los sectores de color, negros y pardos, tenían dominio en la estructura social venezolana.
     Esta era una Venezuela cuya economía se levantaba sobre la actividad agropecuaria, con el predominio de la producción cacaotera, explotado comercialmente con mano de obra esclava y grandes haciendas propiedad de los blancos criollos, hecho este que colocaba al régimen esclavista como el predomínate en aquella sociedad del 19 de Abril de 1810.
     Haciendo un análisis sobre el cuadro de Brito Figueroa, el autor presenta que la base social de la producción estaba conformada por la mano de obra esclava, la cual era negra, dándose una doble situación de explotación y subordinación, justificada por el color de la piel. Seguido presenta a los indígenas, donde destacan los tributarios. Posteriormente a estos 2 bandos se encuentran los pardos y negros libres, conformado por los esclavos negros y por los blancos de orilla, este es el grupo poblacional mayoritario. Por último y como clase social dominante están los blancos, divididos en peninsulares y criollos. Los primeros formados por funcionarios de la corona española y los segundos, los criollos, la clase pudiente que en palabras de Brito Figueroa “no puede ser definida sino como una clase terrateniente esclavista”, ellos tenían la ´propiedad de las tierras, de los esclavos, monopolizaban el comercio de los productos agropecuarios exportables y las mercancías importantes.
     En este sentido el autor realiza otra cita de Brito Figueroa que dice
 La clase terrateniente (hacendados y hacendados-comerciantes-prestamistas), impulsada por la necesidad económica de colocar directamente en el mercado mundial los productos agropecuarios mercantilizados, colide con los intereses de los mercaderes importadores y el monopolio colonial, fenómeno que la impele a identificar sus aspiraciones con la libertad de comercio.
     Los criollos aspiraban a la libertad de comercio, lo cual será un aspecto de gran importancia en el interés de esta por la Independencia, entre los interese de la nobleza criolla y la Metrópoli.
     Como ya se ha mencionado no solo los intereses económicos van a propiciar la ruptura con España sino esas ideas de la época, la situación política e ideológica dominante en Europa y América y como estas influyeron en los venezolanos, donde el autor afirma que la mejor manera de abordarlos es a través de los movimientos precursores de la Independencia, es decir, todos aquellos movimientos acaecidos en territorio venezolano antes del 19 de Abril de 1810.
     Se inicia entonces a partir de la segunda mitad del siglo XVIII estos movimientos, cuando la corona busca establecer un mejor control del excedente económico que producían sus colonias en América y la consolidación de un sistema administrativo más eficiente y seguro para la Metrópoli. Donde la corona para poder obtener mejores ingresos puso en acción la ampliación del monopolio estatal del tabaco y la administración directa del impuesto de alcabala.
     Estos hechos generaron evidentemente reacciones en contra, acá el autor cita a Lynch quien dice “a partir de 1765 la resistencia a la tributación fue constante y en algunos casos violenta. Y mientras desde 1779, España empezó a presionar con más fuerza para financiar la guerra con Gran Bretaña, por lo que la oposición se hizo más desafiante”.
     En el caso de Venezuela el comercio era monopolizado por la Compañía Guipuzcoana, generando esto reacciones entre los sectores de la colonia. Donde lo más significativo fue la rebelión de Juan Francisco de León entre 1749 y 1752. Arcila Farías en relación a esta Compañía expone lo siguiente;
La Compañía influyó mucho por su carácter de representante del capital español más exclusivista y ávido de ganancias, en que se creara, por reacción, el sentimiento de nacionalidad; es un hecho que desde el preciso momento de su llegada se comenzó a hablar de los opresores, aludiendo a los comerciantes españoles, y las revueltas que se produjeron en Venezuela durante el siglo XVIII se encaminaban a sacudir, si no la dependencia política, sí el yugo económico.
     Luego de Juan Francisco de León, en Venezuela se presentaron una serie de conflictos y movimientos considerados como ya se ha dicho precursores de la independencia.
     El autor presenta en su obra un cuadro donde se representa los movimientos considerados precursores de la emancipación, partiendo de la obra de Manuel Vicente Magallanes, Luchas y Emancipaciones en la Venezuela colonial, allí entre los más destacados se encuentran la Insurrección de José Leonardo Chirinos, la Conspiración de Gual y España y el Alzamiento de esclavos en Cariaco, La Expedición de Francisco de Miranda.
     Estos movimientos especialmente los de Gual, España y Miranda, llevan presente el ideal de Independencia. Los de Chirinos, el de cariaco y los propios Gual y España llevaban presente una concepción republican y una postura anti-esclavista. Sin embargo estos movimientos fracasaron políticamente y fueron rechazados por la sociedad colonial. Tomando la cita tomada por el autor de Germán Carrera Damas se explica el por qué de esta situación, donde Carrera expresa “…esta es una sociedad monárquica, católica, esclavista y discriminatoria en lo racial, estas influencias…se volvían ineficaces en cuanto intentaban actuar directamente.”, estas características son las que explican el por qué estos movimientos influenciados por las ideas de la Revolución Francesa fracasaron.
     Siguiendo las palabras de Carrera Damas la sociedad rechazaba el planteamiento revolucionario francés, pues este era antimonárquico y antireligioso y como ya se hizo mención la sociedad era monárquica y católica, lo rechazaban también por sus ideales de igualdad social y racial y de libertad de los esclavos, y la sociedad colonial era esclavista y discriminatoria.
     Por ende es evidente que no apoyaron estos movimientos, tales como el de Gual y España que estaban conformados por individuos pertenecientes a las clases de los pardos y blancos de orilla. Chirinos en su insurrección es apoyado por negros e indios (donde el mismo era un  zambo), y en relación a Miranda este es apoyado por los ingleses.
     Al estudiar las características ideológicas de la sociedad colonial y las características de los individuos que desarrollaron este movimiento se puede determinar el por qué esta sociedad no los apoyó y si los rechazó, lo cual queda muy claro en la explicación de Carrera Damas.
     Cabe resaltar que hasta ahora, en palabras del autor  Reinaldo Rojas, la actitud de los blancos criollos es francamente conservadora, defensora de la monarquía y de decidida oposición a los movimientos influenciados por la Revolución Francesa.
     Llegando ya al tercer capítulo de la obra “Hacia el 19 de Abril de 1810”, se analizan los acontecimientos que llevaran a este día tan importante donde el panorama económico, social, político e ideológico del cual se ha venido haciendo alusión son los determinantes a 1810, serán de vital importancia a ese proceso coyuntural que ocurrió en 1810, puesto que el 19 de Abril no es un caso fortuito sino que una serie de acontecimientos acaecidos con anterioridad serán los determinantes para que este hecho ocurra.
     Un hecho significativo anterior al 19 de Abril, que se da en ese camino hacia ese día, son los acontecidos en 1808, en la denominada conspiración de los mantuanos, pero que para poder estudiarla debemos conocer el contexto que se estaba viviendo internacionalmente en esa primera década del siglo XIX, donde en 1804 Napoleón es coronado Emperador de los franceses, y que a partir de 1807 va iniciar su expansión por Europa, comenzando con el bloqueo continental contra Inglaterra, el cual es apoyado por España y rechazado por Portugal situación que genera que en ese mismo año Francia firme con la España de Godoy el tratado de Fontainebleaue, con el que se determina la invasión y posterior reparto de Portugal. Luego trapos francesas al mando Murat invaden España y en 1808 el Rey Carlos IV abdica a favor de su hijo Fernando, pero por presión de Napoleón Carlos IV revoca su abdicación a favor de Fernando y cede todos sus derechos en España y América a Napoleón. El cual proclama a su hermano José Bonaparte Rey de España.
     A partir de allí se inician conflictos internos en España, luchando contra las tropas napoleónicas. Al no tener un Rey se formaron en cada provincia juntas provisionales, que luego se unieron y formaron una Junta Central Suprema Gobernativa del Reino, con el objeto de enfrentar la ocupación francesa y defender los derechos reales de Fernando VII, esto sucedía en Sevilla entre 1808 y 1810,y luego se crea el Consejo de Regencia que asume el gobierno español en la resistencia.
     Este es el panorama que se vivía en España e Hispanoamérica, esta crisis del imperio español se hizo sentir.
     En palabras de Uslar Pietri, Napoleón era invencible, así era visto por todos. Donde Francia tenía enfrentamientos principalmente con Inglaterra, con quienes los criollos tenían su comercio, donde el Gobernador de la Provincia no le importaba este comercio, sino estar bien con el gobierno que ocupara Madrid para así mantener su cargo. Es aquí donde Rojas explica 2 posturas. Primero, la conducta ambigua de los gobernadores españoles en Venezuela y la segunda, la separación de intereses entre blancos criollos y funcionarios peninsulares.
     Esta ruptura es la que se presenta en 1808 en la llamada Conspiración de los Mantuanos, quienes al tanto de la formación de las Juntas Provinciales en España intentaran realizar las mismas en Caracas, donde tras varias reuniones un grupo de mantuanos caraqueños firman un documento pidiendo al Gobernador y Capitán General la conformación de la junta, sin embargo las autoridades españolas encarcelan y destierran a los firmantes. Acá se evidencia la presencia de los blancos criollos caraqueños y su primer gran paso hacia los acontecimientos del 19 de Abril.
    Como último capítulo nos encontramos con ¿Por qué el 19 de Abril de 1810?, tenemos que para ese año la situación de España era sumamente complicada, las tropas francesas habían avanzado en el territorio y ocupaban casi toda la península, con la excepción de Lisboa, Cádiz, algunas regiones gallegas y la España insular. En enero se había disuelto la Junta Suprema y se había establecido en su lugar el Consejo de Regencia en León. En España no había Rey y esta nueva autoridad está en entredicho.
     Con respecto a Venezuela los firmantes del acta de 1808 son indultados en 1809 y en ese mismo año llega un nuevo Capitán General al territorio, Don Vicente Emparan. Quien el 18 de Abril de 1810 informa mediante un cartel a toda la sociedad que las tropas francesas habían conquistado Andalucía sin disparar un tiro.
     Por otro lado, ese mismo día, los criollos que habían conspirado contra las autoridades españolas en 1808 deciden en casa de Manuel Díaz Casado dar un golpe el día siguiente. Para ello convocarían a un Cabildo extraordinario en el Ayuntamiento, donde procederían a deponer a Emparan y asumirían el Gobierno. Sin embargo, para evitar desconfianza y no provocar la reacción popular contraria a la medida, se nombraría una Junta Suprema defensora de los derechos reales de Fernando VII.
     A los criollos se les presentaba un gran problema y era que la sociedad era realista, esto como ya se ha hecho mención, era su ideología la de la monarquía, donde solo una élite tenía conocimiento sobre las nuevas ideas del liberalismo, la ilustración, ideas estas que los influenciaron sobre todo luego de la Revolución Francesa, además estos criollos eran conscientes y ya habían vivido el rechazo por parte del pueblo por tener estas ideas.
     Tal como se hizo referencia al hablar de los capítulos anteriores, los criollos tenían sus propios intereses tantos económicos como políticos, ya este sector había alcanzado la madurez para poder determinar que les favorecía y que les perjudicaba como sector social. Los mismos se encontraban en una diatriba, por un lado Fernando VII era volver al pasado, Napoleón era una moderna dominación y por otro lado esta Inglaterra, la cual a través del comercio les abría un mundo de posibilidades, pero para ello debían de tomar el control de la provincia. Por ende ante esta coyuntura el ideal de Independencia cobrará más fuerza y pasará a primer plano.
     Siguiendo con los acontecimientos del 18 de Abril, se comisiona a Martin Tovar y Ponce y a Nicolás Anzola para que convencieran al realista José de Llamozas de que convocará al día siguiente un cabildo extraordinario con el objeto de instalar según lo planeado una Junta Suprema para defender los derechos de Fernando VII. Sin embargo, el complot es conocido por dos realistas, el magistral de la Iglesia Catedral Juan Vicente de Echeverría y el Prefecto de los Capuchinos fray Francisco Caracas. Quienes avisan a Emparan sobre la situación.
     Mientras tanto los conspiradores en casa de José Angel de Alamo ultimaban los detalles del golpe que efectuarían al día siguiente. Entre los allí reunidos se encontraban personajes como los hermanos Mariano y Tomas Montilla, José Félix Ribas, Martin Tovar, Dionisio Sojo, Manuel Díaz Casado, Narciso Blanco y Nicolás Anzola.
     Ya llegado el 19 de Abril, según lo planeado se convoca al Capitán General a una sesión extraordinaria del Ayuntamiento. Al llegar a la misma Llamozas explica a Emparan el por qué de haber convocado un cabildo, con el fin de instalar una Junta Suprema, en vista de la preocupación que tenían sobre el cautiverio de Fernando VII y por la disolución de la Junta que regia en España. El objetivo de los mantuanos era tomar ellos el poder, pero bajo la invocación de la defensa de los derechos de Fernando VII, esta fue la estrategia empleada por ellos para justificar la instauración de una Junta Suprema.
     Aunque no todo fue sencillo aquel día, el Capitán Emparan expuso que España tenía autoridad la cual regia en el Consejo de Regencia y que lo mejor era esperar noticias de España. Ante esto el mismo decide ausentarse del Ayuntamiento para asistir a la iglesia en vista que aquel 19 de Abril era Jueves Santo. Sin embargo Emparan no logra retirarse en vista que Francisco Antonio Salias no se lo permite, regresando este al Ayuntamiento.
     Se encuentran presentes en la sesión Juan Germán Roscio y Félix Sosa, como diputados del pueblo, el Presbítero José Francisco Ribas y el Canónigo José Cortes de Madariaga, como diputados del clero, y José Félix Ribas y Gabriel de Ponte y Mijares como representante de los pardos. En un primer momento Roscio y Sosa proponen a Emparan como presidente de la Junta Suprema propuesta que es rechazada de inmediato por Madariaga, quien además acusa a Emparan de engaño y perfidia, exigiéndole su renuncia inmediata del cargo. Es allí cuando el Capitán General en el balcón del Ayuntamiento pregunta al pueblo que se encontraba presente si estaban de acuerdo con su gobierno, donde el mismo dice que no y por ende Emparan renuncia a su cargo. Es allí donde ocurre la tan famosa escena conocida por todos, en la cual l estar Emparan en el balcón y preguntar al pueblo Madariaga hace señas negativas al mismo, haciendo entonces que estos digan no al Capitán General.
    Acá tomamos la cita realizada por el autor de Domingo Díaz, quien a su vez citando a Gil Fortoul sobre este acontecimiento dice “a su espalda, Madariaga hace signos negativos, y al punto el doctor José Rafael Villareal grita desde la plaza: ʻno, noʼ; grito que la muchedumbre repite en coro. Emparan exclama: pues yo tampoco quiero mando”.
     Luego de la renuncia obligada de Emparan, se iniciaba una nueva etapa en la vida política y social venezolana. Aunque se presentaba unos inconvenientes, tal como afirma Rojas, esa alianza simbólica entre blancos, clero y pardos no es cierta, y también que no todas las provincias apoyaron la decisión de instalar esta Junta Suprema. Las provincias de Margarita, Barcelona, Cumaná, Barinas, Guayana, Mérida y Trujillo, apoyan la moción y quedan solo del lado realista las provincias Coro y Maracaibo.
     Transcurridas unas semanas, el 3 de mayo la Junta Suprema escribe a la Regencia española, explicándole sobre las decisiones tomadas y sobre el desconocimiento de autoridad de este Consejo de Regencia. Como es de esperarse, dicho organismo declara rebeldes a los venezolanos y nombra un nuevo Capitán General, en este caso al Gobernador de la Provincia de Maracaibo, Fernando Miyares y envía desde Puerto Rico a Antonio Cobarría quien desde allí debe organizar un expedición naval para someter a los patriotas.
     La Junta inicia una serie de actividades para por un lado obtener apoyo interno y por otro reorganizar el aparato administrativo. Son destacados delegados en diferentes puntos del país para formar más Juntas como la de Caracas. También dicha Junta envió una correspondencia oficial a todos los Cabildos de América, donde se les invitaba a contribuir a la grande obra de confederación americana española. Se envían dos comisiones al extranjero, una a Estados Unidos formada por Juan Vicente Bolívar, Telésforo Orea y José Rafael Revenga y otra a Inglaterra integrada por Simón Bolívar, Luis López Méndez y Andrés Bello.
     A la ciudad de Barquisimeto es enviado un comisionado de la Junta Suprema de Caracas, el Dr. Domingo Antonio Perera, quien convoca a las autoridades y notables del pueblo para comunicarle sobre los acontecimientos acaecidos en Caracas, invitándolos a reconocer dichos hechos. Los cuales son acogidos por la mayoría de las autoridades, con la excepción del Abogado de la Real Hacienda y Sub-delegado de la Intendencia de Hacienda en Barquisimeto, Dr. José Manuel Oropeza. Quien renuncia a su cargo.
     Se evidencia entonces la conducta patriótica de los barquisimetanos  y quienes de inmediato formaron parte de las filas en el campo patriota, entre esos barquisimetanos  están; los Alcaldes de primera y segunda elección, don Antonio Gonzales García y don Francisco de Paula Escalona, José de Alamo, los doctores Domingo de Alvarado y José Rafael Guzmán, los hermanos Aldao, Mateo Salcedo, los Ramos, Claudio Leverón, José de Andonegui, Nicolás Rosales, el Presbítero Pedro Planas, León de Mérida, Santiago y Francisco Torres.
     A fines de 1810 pasa por Barquisimeto el Marques de Toro, en campaña militar contra coro. Es recibido con grandes muestras de apoyo, hecho que se evidencia en el alistamiento de dos mil hombres en el ejército. Se incorporan al movimiento independentista personajes como Jacinto Lara, Pedro León Torres y Florencio Jiménez. Mientras en Caracas la Junta Suprema sesionaba el primer congreso, el cual se encontraba dividido en dos sectores, uno radical, organizado por la Sociedad Patriótica liderizado por Miranda, Bolívar, Ribas, los hermanos Salias, los Paúl, Francisco Javier Yánez, Espejo y otros jóvenes republicanos, quienes pregonaban la ruptura inmediata con España y la declaración absoluta de la Independencia; y el otro sector, que era más conservador y promovía que se esperara más tiempo.
     Sin embargo será el sector más radical el que presione a los diputados del Congreso y logren la Declaración de la Independencia el 5 de Julio de 1811.
     Seguido a los cuatro capítulos que conforman la obra nos encontramos con los anexos documentales, en esta oportunidad y como ya se mencionó el autor contará en la obra con cuarto documentos; el primero, sobre la Instalación de la Junta Suprema de Venezuela en el Glorioso día 19 de Abril de 1810, el Acta de Ayuntamiento de Caracas, la cual es el acta constitutiva de la Junta Suprema en defensa de los derechos de Fernando VII, segundo documento, el Acta de la Independencia de Venezuela, acta en la cual se declara la absoluta Independencia de España, donde firman los representantes de las 7 provincias reunidas en Congreso en 1811. Como novedad en esta edición se agrega la Relación de Emparan al Rey, en la cual el Capitán General narra los hechos registrados ese 19 de Abril y su versión sobre los mismos, también se anexa otro documento en este caso El 19 de Abril de 1810 Versión del Intendente de Ejército y Real Hacienda don Vicente Basadre, en el mismo el Intendente expone su versión sobre los acontecimientos del 19 de Abril, en el documento Basadre habla sobre los antecedentes de la rebelión de Caracas, de la situación de las autoridades españolas luego del 19 de Abril y de la instalación de la Junta Suprema.
     Posteriormente a los anexos documentales nos encontramos con dos nuevos estudios que presenta el autor, relacionados con la Independencia, uno sobre Venezuela 1811: Crisis del Antiguo Régimen, Imaginario Político y Nación.
     Acá el autor afirma que el 5 de julio de 1811, es la fecha de declaración de la independencia por el primer congreso nacional. En un tiempo de corta duración, quince meses apenas, aparecen en el escenario nuevos actores sociales, se fundan las primeras organizaciones políticas, aparece la prensa doctrinaria y con ella las primeras manifestaciones de la opinión pública, propiciando con ello nuevos espacios de socialización y la construcción de imaginarios políticos en los que se expresa el tránsito simbólico del antiguo régimen absolutista a un régimen republicano imaginado como nación, en un contexto de conflicto social, caos institucional e  incertidumbre política, pero también de esperanzas por un futuro de independencia, progreso y libertad.
     El papel de la prensa será fundamental en el nacimiento de los imaginarios políticos y en las manifestaciones de la sociedad, donde la imprenta jugará un papel fundamental a partir de su llegada al país  en 1808 y la aparición del primer periódico., que hace posible que una lengua impresa y una comunidad de lectores echaran las bases para el cultivo de una conciencia nacional. Se trata de la aparición de una “esfera pública política” constituida de la sociedad burguesa. Esfera donde se gesta la opinión pública y se forma un público como instancia de crítica. La prensa fue sin lugar a dudas forjadora de la opinión pública que actuó decididamente el 19 de Abril de 1810.
     Forjadora además ese imaginario de nación moderna y liberal, de una comunidad de ciudadanos iguales en derechos y deberes, imaginario que surge sobre todo luego de la Declaración de Independencia. Se crea entonces el primer emblema que represente a la nación y sus simbolismo, se crea la bandera la cual se identificará con esa imaginario y en la cual estarán presentes tres tradiciones; la indígena, la hispana y la liberal.
     El otro estudio es sobre Francisco de Miranda: Reflexiones alrededor del Hombre y su Obra. Presentando a ese gran personaje que fue el Generalísimo, quien ha sido opacado en la historia de Venezuela por la sombra de Simón Bolívar, aunque Miranda fue un gran luchador por la emancipación, sin embargo no vio consolidado sus esfuerzos. Él desde el siglo XVIII inicia su gesta por la Independencia de Venezuela y de Hispanoamérica. Fue un hombre completo y complejo que participó en la Independencia de Estados Unidos (colonias inglesas) en 1777 y en la Revolución Francesa 1789. Partiendo de estas revoluciones y de ver la independencia de la monarquía este era el sueño que tenía para su tierra.
     Tras el análisis de la obra, se puede concluir que el 19 de Abril no fue un hecho fortuito o de mera casualidad, sino que una serie de acontecimientos que se desarrollaron entre fines del siglo XVIII y principios del XIX serán los desencadenantes de este día, donde causa fundamental, según lo afirma el autor en su discurso realizado en Cabudare en 2002 con motivo del 192º aniversario del 19 de Abril de 1810, aquí explica que la causa fundamental fue la “usurpación de la corona española por parte de Napoleón Bonaparte, en 1808 impone a José Bonaparte como Rey de España y, por tanto; de sus colonias en América”, de allí será causa fundamental en los acontecimientos de 1810, cuando los criollos toman el poder de la península a través de la Junta Suprema en pretexto de defender los derechos de Fernando VII usurpados por Bonaparte.
     Se puede concluir también que el 19 de Abril de 1810 fue el paso inicial hacia la posterior Declaración de Independencia, puesto que este día debe ser considerado así como el inicio del proceso de Independencia más no como la fecha de Declaración de la misma. En este sentido Rojas expresa en el discurso pronunciado en Carora en 1997 en el 187º aniversario del 19 de Abril de 1810 que “el 19 de Abril se nos presenta como el paso inicial de la Independencia, sin el cual no hubiésemos llegado a la Declaración de Independencia el 5 de Julio de 1811 ni a su conquista efectiva el 24 de Junio de 1821 en las sabanas de Carabobo
     Para realizar esta obra el autor se documentó en fuentes y documentos históricos, muy importantes para poder desarrollar el tema planteado por el mismo. Obras que abordan el contexto venezolano e internacional.
     Consultó obras de otros grandes autores como Eduardo Arcila Farías, Federico Brito Figueroa, Germán Carrera Damas, José Gil Fortoul, Guillermo Morón, Lisandro Alvarado, Uslar Pietri, Manuel Vicente Magallanes, entre otras. Fuentes que servirán para la realización de esta obra. Estos estudios tomados como referencia abarcan la Historia de Venezuela, la economía durante la colonia, las clases sociales, las revoluciones tanto en Venezuela, América y Europa, referencias de fuentes historiográficas para sustentar lo planteado por el autor sobre el 19 de Abril.
     Es evidente que realizó todo un trabajo de investigación al momento de escribir esta obra, para poder sustentarla y avalar sus ideas expuestas. Se puede afirmar que los planteamientos del autor son sinceros y exactos, en vista al trabajo de investigación realizado.